REBECA COLLADO | Ferrol | Domingo 3 septiembre 2017 | 12:05
No fallan. Las Meninas de Canido volvieron a deslumbrar y a encandilar a todo Ferrol. Este sábado media ciudad se dio cita en Canido para meninear, comer, beber, bailar y disfrutar del ambientazo que había en cada rincón del barrio alto de la ciudad.
En esta edición del evento muchos artistas se congregaron en la arteria principal de Canido, la calle Alegre, plasmando Meninas panaderas, otras de figuras geométricas e incluso se han sumado a la fiesta unas Meninas de cuento con Caperucita y los tres cerditos, entre otros.
El gran formato está reinando en estas Meninas de Canido 2017, que aún continúan este domingo. Una de las que más está gustando, sobre todo a los que somos del barrio de toda la vida, es la impresionante pintura de Luis, el fojereiro de Canido, con un toque de Velázquez.
Impresionante también la obra del grafitero SFHIR, que necesitó una grúa andamio para poder realizar su participar versión de las Meninas. Este año también estamos viendo esculturas de Meninas y como es habitual, muchas tienen un punto reivindicativo con los colores del colectivo LQTBI, recordando el lema de la República francesa: Liberté, Égalité, Fraternité.
La gatonina de Bárbara Rico no faltó a la cita y por fin tenemos una Menina del Uni Ferrol. Era imprescindible. El mundo Pokémon también se coló en esta edición del evento y así hasta unas 80 Meninas más.
En definitiva, una explosión de arte, de buen rollo, de camaradería entre pintores, vecinos y visitantes. Un fin de semana en el que parece que nos cuesta menos sonreír, es más, lo hacemos con ganas y nos paramos en medio de la calle con amigos y conocidos con los que no nos cruzamos el resto del año, a pesar de vivir en la misma ciudad o a unos kilómetros cruzando el puente de las Cabras.
Siempre digo que el domingo después del boom de las Meninas es el mejor día para conocerlas mejor. Podemos fijarnos bien en sus detalles, prestar atención a lo que nos quieren decir desde su trocito de pared y sacar la cámara de fotos para retratarlas y guardarlas para el recuerdo.
Y cuando el jolgorio de este fin de semana desaparezca, los que nos quedamos aquí los 365 días del año tendremos la oportunidad de ir conociendo poco a poco a nuestras nuevas vecinas. Y es que aunque no lleven tantos años con nosotros, ya son de Canido de toda la vida. Así que a las recién llegadas solo os podemos decir, Opaí!
Debate sobre el post