RAÚL SALGADO | @raulsalgado | Ferrol | Lunes 25 mayo 2015 | 18:38
Una cosa es lo que se vota y otra quién acaba gobernando. En Ferrol se vislumbra un pacto tripartito inédito entre las fuerzas de izquierda, que llevaría a Jorge Suárez (Ferrol en Común) a la alcaldía gracias al apoyo de PSOE y BNG.
Las negociaciones parecen llamadas a desembocar sin grandes dificultades en un acuerdo, especialmente ante las declaraciones de la candidata socialista, Beatriz Sestayo, a la expectativa pese a perder dos ediles por la posibilidad de desalojar al PP de la plaza de Armas.
En todo caso, Ferrol en Común, como las otras dos formaciones citadas, tendrá que designar de inmediato un equipo encargado del diálogo con los partidos. Entonces se podrá empezar a hablar. La coyuntura de la ciudad es diferente a la de otros municipios del entorno, en los que las urnas han repartido mayorías absolutas inéditas y fragmentación pocas veces vista en los últimos años.
Narón y Neda
Narón no experimentará cambios. Terra Galega acaricia la mayoría absoluta y José Manuel Blanco repetirá como alcalde, ya sea por mayoría simple o reeditando un pacto con dos de las tres patas de su actual gobierno que han conseguido representación, ya que Converxencia Galega desaparece del consistorio.
Un respaldo de PSOE y BNG no dejaría esta vez al PP de nuevo como único ocupante de la oposición, ya que debutan Izquierda Unida y Eliximos Narón Electores. Mientras, Neda se expone al retorno del PSOE a la alcaldía tras los dos mandatos del ahora popular José Ignacio Cabezón como regidor.
Sin embargo, Ángel Alvariño necesitaría el voto de la nueva formación Moveneda o del BNG, que regresa a la corporación y que no tuvo antaño buenas vibraciones con el PSOE nedense. Completa la corporación Converxencia Galega, que se estrena en Neda y de la que se desconoce todavía su postura ante la investidura tras una campaña en la que no ha dado señales de vida.
Fene y Ares
Más revuelto se prevé el dilema en Fene. Mantiene el PP su condición de fuerza votada, pero sus 7 ediles contrastan con los 10 que suma la izquierda. Sin embargo, no tienen por qué cuadrar necesariamente los números. BNG y PSOE suman otros 7, pero superadas las rencillas de años atrás entre ambos partidos está por ver si habría un punto de encuentro.
Habría que comprobar también si una formación teóricamente muy cercana a ambos, Izquierda Unida, se incorporaría. Qué decir de la novísima Somos Fene, son todo dudas sobre su posicionamiento. Donde no se esperan sobresaltos es en Ares, con Julio Iglesias por tercera ocasión como primero en la lista.
El regidor socialista ha pactado de modo puntual con el único edil de NAL, Luis Cendán, ex del PP, y son conocidas las fricciones a nivel local de PSOE y BNG, que llevaron a los nacionalistas en su día a investir a Iglesias con su voto, pero negar pacto estable alguno. Son de Ares, avalada por Izquierda Unida, es la nueva incógnita con su entrada en un consistorio más fragmentado.
Mugardos y Valdoviño
El PP ha sido el primero en Mugardos al perder el BNG, actualmente en la alcaldía, la mitad de sus ediles (de 4 a 2). Izquierda Unida es la fuerza más votada entre las de izquierda, pero no parece sencillo reeditar el actual pacto con nacionalistas ante su merma. Sumarían un escaño más que los populares, que tienen 5, pero hay más oposición: ICM debuta con 3 y el PSOE tiene uno.
Valdoviño, tradicionalmente municipio difícilmente gobernable y cuna de partidos de toda condición surgidos de escisiones del PP, seguirá teniendo cinco grupos, pero parece apostar al fin por una mayoría más o menos clara.
El PSOE de Alberto González duplica sus escaños y se queda a uno de la mayoría absoluta, por lo cual una alianza con BNG o Centristas -esta última parece improbable tras experiencias pasadas- daría color rojo al sillón de alcalde.
El papel del BNG se antoja decisivo, cualquier alternativa que pivotase en torno al PP parecería condenada al fracaso por su presencia.
Cedeira, Moeche, San Sadurniño y As Somozas
Mientras, en una Cedeira que sigue al 92,22 % del escrutinio se vislumbra otro salto de derecha a izquierda, desbancando un tripartito al popular Luis Rubido. El socialista Pablo Moreda sería alcalde si recibe el aval de BNG y Anova, que debuta con dos actas.
La mayoría absoluta de San Sadurniño resiste para el BNG de Secundino García Casal, que añade otra en el concello limítrofe de Moeche, inédita y muy relevante ante la crisis interna de la familia del PP, dividida el pasado mandato entre las siglas conocidas y las de Progresistas por Moeche. Xulio Cribeiro dará paso a Beatriz Bascoy.
As Somozas es diferente, una de las contadas localidades de toda España en las que toda la corporación tendrá miembros de un único partido, el PP, liderado por Juan Alonso Tembrás.
Eume
Eume se consolida como granero del PSOE, que recoge aquí tres mayorías absolutas y una simple. Solamente Cabanas es feudo del PP, pero pierde la superioridad en el pleno por apenas diez votos.
Germán Castrillón tendrá que pactar, pero únicamente una fuerza podría estar dispuesta si se recurre al historial, la que fue su socia de gobierno, Agrupación de Electores de Cabanas.
En caso de no cuajar esta opción, el socialista Delfín Feal podría desbancarle con el apoyo de esa misma AEC, el BNG que retorna tras su división interna y el nuevo Somos Cabanas.
Histórico es el triunfo de Bernardo Fernández Piñeiro en Pontedeume, de Manuel Meizoso en A Capela y de Valentín González Formoso en As Pontes para el PSOE.
Este último repite mayoría absoluta, que atesorarán desde junio los dos primeros, Fernández al vencer a un PP que pasa de primero con pleno dominio a segundo y Meizoso al ampliar su ventaja.
El también socialista Andrés Feal regresa a la alcaldía de Monfero, pero tendría que sustentarse en un BNG al alza. Introducir al gobierno independiente en el PP no ha surtido efecto.
Ortegal
Ni siquiera Ortegal se libra de los vuelcos, con una mayoría absoluta inédita del PSOE en Ortigueira que situará a Juan Vicente Penabad en lugar de Rafael Girón.
Mañón repite con Alfonso Balseiro (PP) y Cerdido entrega su mayoría, hasta ahora popular, al socialista Benigno Galego. Por último, se amplía la representación en Cariño ante la ruptura conservadora hacia AECA.
José Miguel Alonso Pumar podría devolver la alcaldía al PSOE si el BNG, que la ostenta ahora, da su voto tras pasar del primer al tercer puesto del listado electoral cariñés.
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