FERROL360 | Miércoles 21 agosto 2019 | 21:12
El edil de Seguridade e Tráfico, Germán Costoya, y el jefe de la Policía Local, José Antonio Chao, han presentado este miércoles el dispositivo de seguridad que se llevará a cabo durante las Fiestas de Ferrol, que comienzan el viernes. Un dispositivo que tendrá en su punto de mira el consumo de alcohol entre los menores.
Y es que según el informe realizado por la Policía Local durante las fiestas de San Xoán, Esmelle y Santa Mariña, de las 138 intervenciones realizadas 72 fueron por intoxicación etílica. Es decir, casi una de cada dos fueron por abuso de bebidas alcohólicas. De ellas, en 47 casos los padres tuvieron que ir a buscar a sus hijos menores.
Así, para la semana grande de la ciudad las actuaciones policiales estarán enfocadas a «minimizar o consumo entre menores de idade», haciendo hincapié en las conductas incívicas o ilegales relacionadas con el consumo y venta de alcohol. Para ello se pondrá en marcha un dispositivo nuevo en Ferrol con dos modalidades de actuación: Filtro e Intro.
La primera establece controles de acceso al recinto de los conciertos con botellas. Para ello se delimitará todo el perímetro de la superficie donde se desarrollará el evento, y contará con unos 10 efectivos, además de los recursos materiales necesarios. En cuanto a modalidad Intro, se trata de una vigilancia realizada por polícías sin uniforme distribuidos entre el público. En este caso se contará con seis policías.
Desde el Concello inciden en que su objetivo es la prevención del consumo de alcohol entre los más jóvenes y por este motivo aboga porque las sanciones económicas derivadas de posibles infracciones se sustituyan por la participación en un programa de medidas reeducadoras, que incluye tareas de limpieza en las zonas donde se realizan botellones o recibir charlas sobre los daños del consumo de alcol.
Además, el dispositivo de la Policía Local incluye la invitación a los locales que se encuentran en las cercanías de las zonas de los conciertos a participar directamente en la estrategia de prevención, instando a los responsables a dejar que solo salgan al exterior bebidas en envases de plástico. Desde el Concello recuerdan que la venta de alcohol a menores supone una sanción mínima de 3.000 euros.
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