RAÚL SALGADO | @raulsalgado | Ferrol | Viernes 6 junio 2014 | 13:36
Invocando a la Defensora del Pueblo o a entidades como Cáritas, el grupo municipal del PSOE en Ferrol ha reiterado este viernes que el Concello debe propiciar la apertura de comedores escolares durante las vacaciones estivales. En rueda de prensa, los concejales Jaime Pena y María López aseguraron que «va a haber niños que no van a hacer tres comidas al día», por lo que ven necesaria y urgente esta medida.
Tras ser rechazada en el último pleno una iniciativa socialista en este sentido, los ediles han resaltado que sus recientes visitas a una docena de colegios públicos y concertados de la urbe naval han desvelado que «se daba este fenómeno», aludiendo a una incipiente «malnutrición o nutrición insuficiente o inadecuada».
Pena afirmó que la negativa del gobierno revela una «ausencia de sensibilidad» y de «humanidad» que ven «intolerable». Exigen al grupo liderado por José Manuel Rey Varela reflexión, al estimar que «es claramente un problema que se está dando en esta ciudad». María López subrayó que muchos alumnos reciben en los comedores la «única comida con fundamento que hacían al día» durante el curso.
Por ello, reclamó al regidor que reciba a los directores de los centros y que «se quitase esa venda de los ojos». Se refirió a la petición expresada en este aspecto por la Defensora del Pueblo, «que no es sospechosa de ser del PSOE», y alertó de que asociaciones como Dignidad comprueban cómo en Ferrol «muchas familias de un litro de leche hacen dos», gracias al agua.
Ayuda social
Citó ejemplos como el del entorno de la parroquia de O Rosario, en O Inferniño, con unas 300 familias atendidas por Dignidad. Ejercen, en opinión de la edil, una «labor que corresponde a la administración local». «Es sencillísimo», dijo, opinando que «el trabajo está avanzado» al existir cifras oficiales orientativas, como los 374 niños becados para comedores o las 327 familias que han pasado a percibir la Risga.
La «situación de muchas familias es límite», añadió López, que resaltó que al movimiento asociativo le ha parecido «una iniciativa necesaria y óptima» la propuesta por esta formación. Elevan el presupuesto necesario para atender a 100 niños en julio y agosto a poco más de 21.000 euros, una «cuantía muy pequeña» que se desembolsaría con un «contrato que no requiere ningún procedimiento largo».
«Es una vergüenza que no se atienda esta demanda», aseguró la concejala, señalando que ningún colegio queda «al margen» de esta problemática, por encima de barrios o estratos. Su idea, consideró Pena, huye de la estigmatización y quiere dar respuesta a la «avidez a la hora de comer» que evidencian muchos estudiantes al no poder completar en sus casas el calendario de comidas recomendable.
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