M. CORRAL | Ferrol | Jueves 18 enero 2024 | 15:00
Ciudadanía y entidades involucradas con el valor patrimonial han mostrado su inquietud esta semana al comprobar que parte del final de la muralla que baja del Baluarte de San Juan hacia la rotonda que da acceso al comienzo de la AP-9 ha sucumbido a la piqueta en las obras que está realizando la Autoridad Portuaria Ferrol-San Cibrao.
La Asociación para a Defensa do Patrimonio Galego (Apatrigal) ha publicado dos fotografías y ha alertado sobre la posibilidad de que se esté «atacando o Baluarte» en las obras que se desarrollan para ampliar la calzada y dotar a la zona de carril-bici y espacio ajardinado. Se trata de una intervención financiada por la Xunta de Galicia y que el Concello de Ferrol había aplaudido al considerar que es otro paso para abrir la ciudad al mar.
Desde la Autoridad Portuaria apuntan que se trata de un «pequeño retranqueo del muro en su parte final», asegurando que no se actuará en los otros tramos de la muralla y que los trabajos estaban ya incluidos en el proyecto constructivo de la obra. En este sentido, insisten en que cuentan con todas las autorizaciones pertinentes y el aval de la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta de Galicia, el organismo competente en esta materia.
Sin necesitar licencia municipal
Aclaran que no cuentan con licencia municipal porque en este caso no es necesaria, al acometerse los trabajos en una vía de servicio del puerto y no depender del Concello para obtener vía libre, como ya ocurrió con la intervención en el Parque de la Ranita. Con todo, incide la Autoridad Portuaria en que se está realizando un exhaustivo seguimiento por parte del equipo de arqueólogos designados para supervisar la obra, que comprueban a diario que se están ejecutando conforme a lo estipulado en los permisos.
Por su parte, desde el Grupo Municipal del PSOE en Ferrol han avanzado a Ferrol360 que presentarán una pregunta sobre este asunto para ser abordada en el pleno. Son conscientes de que no se trata de una obra municipal, afirman, pero sí afecta a un «bien que puede tener su valor» y sobre el que quieren comprobar que existen informes arqueológicos que autorizan su derribo. En todo caso, creen que esta parte de la muralla «debería respectarse» y se han mostrado «sorprendidos» con el retranqueo.
Una muralla casi centenaria
Una de las responsables de la Asociación en Defensa del Patrimonio de Ferrolterra (PAFERR), Carmen Perales Garat, ha explicado en el grupo de Facebook de la plataforma algunas peculiaridades de la muralla en calidad de investigadora, catalogadora de Patrimonio Histórico y especialista en arquitectura militar. La experta alude a una catalogación que realizó para Patrimonio de la Xunta, quien autoriza estas intervenciones, recuerda.
Enumera que la batería de San Juan «desapareció prácticamente a principios del siglo XX debido a las obras de relleno del puerto y a la construcción del ferrocarril que entraba en el Arsenal» y que la construcción actual data de los años 30, siendo «mimética, con escaso o nulo valor militar incluso en sus orígenes, pero que por su valor rememorativo e impacto estético tiene un gran valor para los ciudadanos».
Explica además que al hacer su catalogación patrimonial, «se consideró de valor secundario, susceptible de rehabilitación, la zona del baluarte y muro escarpado que mira al puerto», y aboga porque en «cualquier intervención de este tipo debería hacerse en base a las delimitaciones del bien y su entorno que se definen en el mismo documento».
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