FERROL360 | Lunes 3 febrero 2020 | 19:53
En la noche de este pasado domingo la estatua de José Rubio Gascón Homenaje al pequeño cofrade, conocida popularmente como Capuchoncito, ha sufrido un nuevo acto vandálico que la tumbó por completo en el firme de su emplazamiento en la calle Real.
Los trabajadores de Urbaser fueron quienes descubrieron lo sucedido, recogiéndola del suelo para llevársela al cuartel de la Policía Local de Ferrol. El presidente de la Junta de Cofradías, César Carreño, supo de la noticia en la mañana de este lunes y se puso en contacto con el alcalde, Ángel Mato.
«Le mandé un mensaje a las 14:15 horas y a primera hora de la tarde ya estaba colocada de nuevo en su sitio», explica Carreño al tiempo que lanza una petición para que «cuidemos el patrimonio, que es de todos los ferrolanos» y alaba la «eficiencia» del Concello.
No es, ni mucho menos, la primera vez que Capuchoncito sufre un altercado de este calibre. Es habitual que la gente le ponga complementos de todo tipo para fotografiarlo, pero al margen de las bromas un hombre lo derribó de un empujón en las Navidades de 2016 y en abril de 2018 apareció una pintada a sus pies.
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