FERROL360 | Jueves 12 de septiembre de 2024 | 13:23
La Xunta de Galicia, que según denuncian desde la Confederación Intersindical Galega (CIG) lleva «desaparecida desde el inicio del conflicto del personal de Maitours (grupo Alsa)», ha publicado un nuevo decreto de servicios mínimos que incrementa en un 300% la actividad a realizar. Estos nuevos servicios se imponen coincidiendo con el inicio del curso escolar, «sin que hasta el momento la administración gallega, responsable del contrato, haya mostrado el más mínimo interés en las demandas de los trabajadores y trabajadoras de esta empresa», apuntan desde la CIG.
Con esta orden, explica Xesús Pastoriza, responsable de Transportes de la FGAMT-CIG, la Xunta de Galicia impone el funcionamiento del 80% de los servicios diarios, «impidiendo así que la mayoría del personal pueda ejercer su derecho fundamental a la huelga». Por ello, avanza que la CIG recurrirá estos servicios en los juzgados. «En lugar de implicarse en la búsqueda de una solución, lo que busca la Xunta es reventar la huelga imponiendo unos servicios mínimos excesivos», denuncia.
Pastoriza adelanta que los trabajadores y trabajadoras de Maitours no abandonarán su lucha y están plenamente dispuestos a seguir peleando para conseguir que se respeten sus derechos. Lo que reivindican, recuerda Pastoriza, es que «se les aplique el convenio del transporte de viajeros de A Coruña —como al resto de compañeros de la UTE— o que la empresa compense los festivos trabajados y respete el acuerdo sobre la realización de servicios imprevistos».
El representante de la CIG critica que, tras casi dos meses de huelga, Alsa siga negándose a negociar y avanzar en un acuerdo. «Antes o después, la empresa tendrá que aplicar el convenio provincial, porque así lo establece la normativa laboral y porque así lo determinó una sentencia judicial. No entendemos esta insistencia en dilatar el conflicto, y tampoco entendemos por qué la Xunta no interviene para que la empresa cumpla con la legislación en este punto y en el resto de reivindicaciones», señala.
Pastoriza también denuncia la falta de interés del Concello de Ferrol, a pesar de que la huelga afecta de lleno al servicio de transporte urbano de la ciudad. «La empresa está desaparecida, la Xunta está desaparecida y el Concello está desaparecido, pero los trabajadores y trabajadoras siguen en lucha y seguirán hasta que se garanticen sus derechos», concluye.
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