FERROL360 | Miércoles 18 de junio de 2025 | 8:43
Los trabajadores de la delegación de Hacienda en Ferrol, situada en el barrio de Caranza, se llevaron el pasado martes una desagradable sorpresa al encontrar uno de los ventanales del edificio reventado por el impacto de un disparo.
La bala no llegó a penetrar completamente el cristal gracias al sistema de seguridad, aunque quedó incrustado entre sus capas, lo que ha dificultado su extracción por parte de la Policía Nacional.
Los investigadores sospechan que el disparo podría haberse producido durante una pelea registrada en las inmediaciones del edificio, concretamente frente a las casas de Tejeras. La Policía baraja varias hipótesis, entre ellas la posible conexión con el tiroteo ocurrido en el barrio hace apenas cuatro días, cuando un hombre disparó al aire en un intento de llevarse a su hija durante un conflicto familiar.
Sin embargo, otra línea de investigación apunta a una reyerta entre clanes asentados en la zona, que habría tenido lugar en la tarde del lunes, una vez cerrada la sede de la Agencia Tributaria. Llama la atención que ningún vecino alertó a las autoridades, a pesar de que este tipo de enfrentamientos con armas de fuego no son nuevos en el barrio. En los últimos meses se han registrado otros incidentes similares, algunos incluso durante persecuciones policiales.
El disparo impactó a una altura equivalente a un segundo piso, lo que refuerza la idea de que se trató de un proyectil perdido durante un enfrentamiento a escasos metros del edificio. Agentes de la Policía Científica trabajarán en la recuperación del proyectil para intentar identificar el arma utilizada mediante el análisis balístico.
Por el momento, no se han producido detenciones y la investigación sigue abierta. La sede de Hacienda mantiene su actividad con normalidad, aunque bajo vigilancia reforzada
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